miércoles, 10 de diciembre de 2014

Entrena el CORE

El entrenamiento de la zona media del cuerpo va más allá de lucir sorprendentes abdominales, esculpidos en granito. Es muy importante para toda persona que realice cualquier actividad deportiva e incluso para la vida cotidiana, el tener una zona media o CORE fuerte y bien trabajada. Con esto no me refiero a hacer 5.000 abdominales diarios, como hace Cristiano Ronaldo ( o al menos eso dice ), ya que hay otra forma más efectiva de tener una zona media fuerte, una forma de trabajar más funcional, ya que el que sean visibles a nosotros y al resto es simplemente una cuestión de cuidad nuestra alimentación, las abdominales están ahí pero no se ven por la capa de grasa acumulada.
El Core comprende las zonas del complejo cadera-área lumbar-pelvis, y conecta las extremidades superiores e inferiores. Toda esta musculatura es una zona de transición de fuerzas desde el tren superior al inferior y viceversa, por ello es tan importante en el ámbito de la salud y de la prestación deportiva, ya que el poseer estos músculos bien desarrollados asegura la protección de la zona lumbar, que es la zona más proclive a lesiones puesto que es la parte que más tiene movilidad en la columna.
Como dije hay ejercicios más efectivos que la típicas abdominales, trabajando de manera más funcional obtenemos un trabajo de los músculos en más de un plano y al trabajar con inestabilidad unos músculos ayudan a otros a estabilizarse.

Un programa de entrenamiento del CORE debe incorporar ejercicios que trabajen fuerza, estabilidad y equilibrio. Las últimas investigaciones han dado un valor importante al entrenamiento de la zona media para mejorar el rendimiento y reducir el número de lesiones, ya que al tener una fuerte estructura abdomino-pelvico-lumbar, esta absorbe los impactos que suponen el movimiento de las extremidades al realizar cualquier deporte, permite una buena transferencia a través de las cadenas cinéticas y ayuda a la columna vertebral y la pelvis a mantener la estabilidad durante el movimiento. Y a los hechos me remito, ya que deportes como el golf, tenis,etc... tienen una incidencia de lesión de la espalda muy altas.

La salud en la vida cotidiana es otro importante factor a la hora de plantear parte de nuestro entrenamiento a fortalecer la zona media, especialmente cuando nos referimos a personas de la tercera edad. Uno de los principales beneficios de realizar ejercicio físico es mejorar la capacidad de coordinación neuromuscular, que tiene relación directa con la posición de nuestro centro de gravedad tanto en situaciones estáticas como dinámicas. Lo efectos del envejecimiento precisamente se centran en la pérdida de esa coordinación y aumenta el tiempo de reacción en situaciones como pueden ser pérdida de equilibrio y consecuentes caídas. El equilibrio y la estabilidad que ofrece una zona media bien trabajada, junto con un programa de fuerza forman la combinación perfecta para evitar ese tipo de situaciones, por ejemplo al llevar la compra mientras subimos o bajamos escalones.

Hay muchos ejercicios dentro de un programa para trabajar el CORE, tantos como imagine el entrenador, alejándonos todo lo que podamos de ejercicios más típicos de circo, como he podido observar alguna vez y siempre manteniendo una correcta ejecución y realizando los ejercicios manteniendo una progresión ascendente. A continuación podéis ver algunos ejemplos:



Se puede trabajar el CORE introduciendo gran inestabilidad lo que provoca un trabajo de los músculos en conjunto.

En este ejercicio, de gran trabajo de la zona media,  al estirar y recoger la pelota.